Noche de pintxos, noche de éxito asegurada



El sábado fue una gran noche, tenía muchos invitados en casa. Así que había que organizarse bien para que estuviese todo a punto a la hora que habíamos quedado. Todo salió muy bien y fue un éxito. Por supuesto gracias a mi ayudante, que elaboró dos de los pintxos que tomamos y me ayudó a terminar los demás porque se me echó la hora encima. No se qué haría sin mi hermana, que siempre me ayuda en todo. 

Para quien no sepa lo que son los pintxos, es como se denomina tradicionalmente a una pequeña rebanada de pan sobre la que se coloca una pequeña ración de comida. Recibe su nombre porque tradicionalmente se sujetaba la comida al pan con un palillo, aunque no sea una característica obligatoria. Es muy similar a una tapa. 



El pincho está especialmente asociado a la gastronomía vasca, en la que se suele tomar como aperitivo acompañado normalmente de un vaso de vino tinto (llamado txikito) o un zurito, nombre por el que se conoce al pequeño vaso de cerveza de media caña, aproximadamente; este mismo vaso es conocido en Aragón como penalti, en La Rioja corto, y en otras zonas de España mini. Esta costumbre es muy común en los bares del País Vasco, Cantabria, Navarra, La Rioja, Asturias y en zonas de la provincia de Burgos como Miranda de Ebro. Dada la fama que está adquiriendo esta forma de comer, cada vez son más las personas que deciden realizar su comida o cena a base de pinchos, alternando de bar en bar.



Originalmente los ingredientes a colocar sobre el pan pueden ser prácticamente cualquiera, pero muchas veces son los más habituales en la cocina vasca: pescados (especialmente merluza, bacalao, anchoas, gulas...), tortilla de patata, pimientos rellenos, croquetas, etc. Sin embargo, la abundancia de jóvenes cocineros en el País Vasco y en San Sebastián en particular, fruto de las escuelas de alta cocina y los restaurantes, está propiciando que muchos de ellos se dediquen a elaborar y crear nuevos y cada vez más complejos pinchos, lo que resulta en una constante innovación y aparición de nuevas recetas. Se da cada vez más una coexistencia entre los pinchos tradicionales y la cocina en miniatura.

Lo más habitual suele ser coger uno mismo el pincho, que se sitúa en bandejas sobre la barra del bar, y comerlo de pie mientras se charla con los amigos y se toma la bebida. (Wikipedia)


Os cuento lo que preparamos nosotras:

1. Mini brocheta de champiñón y gambas. Se trata de una brocheta de champiñón con sésamo y salsa de soja y gambas envueltas en bacon.

2. Mini brocheta de pinchitos de pollo. No tiene mucho misterio, son pinchitos de pollo ensartados con cebolla y pimiento verde y tomate cherry a la parrilla.

3. Crujiente de txistorra. Son unas chistorras envueltas con pan bimbo y tostado en el horno.

4. Tartaleta de falso txangurro. Es una tartaleta con atún, mejillones y langostinos gratinado en el horno.

5. Rollitos de calabacín. Tiras de calabacín envueltas con pechuga de pavo braseado y queso crema. 

6. Crema de calabacín con jugo de marisco y gamba envuelta en jamón.  Elaboramos una crema de calabacín y sobre ésta añadimos una gamba envuelta en jamón a la parrilla.

A lo largo de la semana os iré poniendo la receta de cada uno de los pintxos.

Espero que paséis una buena semana.


Artículo escrito por | Ikiya



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